El campo del e-commerce ha evolucionado en los últimos años ¿Qué se entiende por e-commerce hoy y cómo es que la Inteligencia Artificial puede potenciar las transacciones digitales?
La venta online es esencialmente hacer transacciones comerciales de objetos, pasajes, servicios, etc, pero mediado por tecnología, ya sea un sitio web o una aplicación móvil. El término e-commerce se refería solo a la situación online pero hoy eso quedó viejo, lo que está apareciendo ahora es un rango de cosas donde lo online y lo presencial se empiezan a fundir y entremezclar. Empieza a haber modelos mixtos, negocios con posibilidades híbridas.
Todo esto empieza a aparecer cuando en todas las transacciones se puede hacer un seguimiento mucho más preciso de los datos, de lo que está pasando, cómo está comprando la gente, las revisiones que hace.
Las herramientas de Machine Learning e Inteligencia Artificial permiten tomar decisiones útiles para el negocio, permiten mejorar las experiencias del comprador y del vendedor.
En casi 10 años de existencia desde Machinalis han acompañado los cambios de la tecnología en el campo de la Inteligencia Artificial y el Machine Learning. ¿Cómo se ha vivido toda esa revolución desde la cocina de la startup?
Para nosotros ha sido una carrera linda. Empezamos incubados en la Universidad Nacional de Córdoba y éramos una empresa de tecnología general, pero teníamos la oficina al lado del departamento de Inteligencia Artificial de la universidad y empezamos a conversar, tomar proyectos juntos, ayudarlos y luego incorporar expertos en esta área.
Desde el 2012 cuando la Inteligencia Artificial no era un tema tan común empezamos a trabajar esta área, que es muy desafiante porque está en un cambio permanente: lo que hacés, seis meses más tarde es viejo, hay que estar cambiando siempre.
Machinalis ya era proveedor de Mercado Libre, y desde allí trabajaron en algunas soluciones importantes que hicieron una diferencia en la empresa. ¿Cómo fue esa primera experiencia con Mercado Libre?
Trabajamos hace varios años para Mercado Libre en decenas de problemas diferentes y cada uno con su propia solución: hemos trabajado en los envíos, en cómo optimizar cuando un vendedor pone muchas cosas en la caja, achicar el tamaño de las compras para aprovechar mejor el uso del correo, recomendar a los usuarios artículos relacionados al que compran; también hemos trabajado en cuestiones relacionadas con los pagos, identificación de fraude, en la moderación para detectar cuando los vendedores están violando condiciones de servicio. Hay muchas oportunidades para contribuir con la Inteligencia Artificial, que es una de las cosas divertidas de trabajar en esto.
¿Te preocupa el sesgo dentro de las recomendaciones a los compradores?
Es un problema complicado, siempre estamos atentos y es algo a lo que hay que prestarle atención todo el tiempo. Hay muchos sesgos en los que se puede caer, y pueden tener un impacto negativo en los usuarios, en los negocios, en los resultados que obtenés, o simplemente inducir a error aunque no se perjudique a nadie.
Los datos provienen de personas, las personas tienen preferencias y hay que tratar de darse cuenta cuándo eso es un problema. Se hacen muchos análisis estadísticos para intentar minimizar los lugares donde hay sesgo, y además se toman muchas métricas posteriores para detectar si un modelo tiene sesgos. A veces se descubre que lo tiene y hay que corregir y limpiar los datos. Pero es un problema de la estadística en general, y lo que estamos haciendo es una disciplina estadística.
¿Cómo impacta el blockchain en la industria del e-commerce?
Honestamente soy bastante descreyente de muchas de las cosas que hay alrededor del blockchain. Blockchain es una tecnología súper interesante desde el punto de vista teórico-matemático, y algunos problemas como el de dinero distribuido lo resuelve muy bien. Por eso bitcoin ha sido tan exitoso. Pero hay muchas cosas en las que la gente está tratando de aplicar blockchain y que para mí no tiene tanto impacto porque hay otras soluciones más simples que son igualmente buenas.
Blockchain es una base de datos distribuida donde tenés muchos actores que no tiene confianza entre sí, entonces para movimientos de dinero es útil. En el caso de comercio en una misma plataforma todas las transacciones están centralizadas, entonces tenés un actor de confianza que regula las cosas. Podría tener sentido blockchain en algunas aplicaciones que se están investigando como supplay chain, la cadena de provisión entre el productor al consumidor, porque en ese caso sí hay varios actores independientes con algunas cuestiones de confianza para validar. Pero esto no va a ser de las cosas más visibles del impacto de la tecnología en el día a día de lo que es comercio. No va a ser una revolución.